Exposición Camerinos. Teatro Español y Plaza de Santa Ana. Madrid.

09457-penavicky

Ultimísimos días para disfrutar de la muestra fotográfica Camerinos que se exhibe en el Teatro Español y la plaza de Santa Ana de Madrid. Primeros rostros de grandes actores que han pasado por las tablas de la escena, en especial, de la madrileña. El autor es el fotógrafo Sergio Parra (www.sergioparra.es), un habitual “ilustrador de imágenes” de la cartelera teatral. La exposición tiene el gran aliciente de que es gratuita y principalmente callejera. El viandante se topa con las enormes reproducciones al ir al Español o a la cervecería alemana de Santa Ana. Son 51 retratos de grandes actores (curiosamente en su mayoría mujeres) que se miran y observan en el espejo del camerino o a través del espejo de la cámara de Parra. Miradas concentradas, perdidas, empapadas del personaje… Así retrata el fotógrafo a Nuria Espert, Blanca Portillo, Maribel Verdú, Carlos Hipólito, José Luis Gómez, Silvia Abascal, etc. Todos ellos han sido fotografiados minutos antes de salir a escena, en los previos a la acción teatral: casi en el instante de la transfiguración (que diría Marcos Ordóñez).

Paseando en torno a las súper-reproducciones, el aficionado juega a rememorar los espectáculos que en su día vio. Pequeños brochazos de cada obra quedan en el recuerdo, pero en algunos casos lo suficientemente poderosos.

En la fachada, varios grandes. La dama Nuria Espert vestida de Celestina en el montaje del canadiense Robert Lepage, del que vivamente perdura no sólo la interpretación de Espert, sino sobre todo la escenografía fortificada y la música de ese instrumento del Medievo que es la zanfona. A su izquierda, Vicky Peña, que compite en maquillaje por su personaje de pastelera mortífera en Sweeney Todd. Y aquí un alto ante quizás uno de los mejores espectáculos de los últimos años. El musical puesto en escena por Mario Gas fue una de esas vivencias tan extraordinarias que debería imponerse por decreto su reposición cada dos años, como hace la Zarzuela con Los hijos del Capitán Grant.

Seguido a la izquierda, se encuentra Carlos Hipólito: actor que tiene la cansina virtud de estar siempre correctísimo en todos sus personajes. No resbala en ninguno de sus caracteres, y eso que pasa de perdedores (Glengarry Glen Ross) a inmorales (Todos eran mis hijos y Follies), casi sin cambiar de traje.

Girando el eje gravitacional y mirando hacia el conocido como hotel de los toreros de la plaza, unos claros ojos, los más hipnóticos, miran sardónicamente hacia algún lugar. Es Ralph Fiennes en su papel de Marco Antonio en el montaje de Julius Caesar dirigido por Deborah Warner. Otro de esos momentazos escénicos de Madrid del que destacan fuertemente en la memoria la interpretación de Anton Lesser (su representación de Brutus rozó el magnetismo político del propio Sarkozy), Simon Russel Beale y, claro está, esos ojos cautivadores de Fiennes que hechizaron al público “romano” con el emocionante soliloquio shakesperiano.

Siguiendo la hilera, se suceden un gran número de actores, papeles y representaciones. Mirando los rostros semi-maquillados es difícil saber si cada uno ya se ha calzado el personaje o esperará a pisar las tablas.

Salvo prórroga, el 26 de febrero se desmontarán las fotografías, aunque todas ellas pueden verse aún publicadas en la web del proyecto Camerinos http://www.camerinos.es/home-ellas.htm o en la del propio fotógrafo http://www.sergioparra.es.

La clá
http://www.lacla.es

*

Referencias:

Camerinos. Exposición Teatro Español.
http://www.camerinos.es/home-ellas.htm

Sergio Parra. Fotógrafo.
http://www.sergioparra.es

Imagen:
Detalle de la exposición. Fotografía de Vicky Peña de Sergio Parra por cortesía del Teatro Español.