Antes de empezar esta crónica, conviene sentar algún principio. Una reseña teatral sobre una obra no debe abordarse en abstracto ni de forma aislada. El teatro es una representación social y no se entiende fuera de su contexto. “Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo”, decía Ortega y Gasset.
Dicho ésto, ¿cómo abordar la crítica de Los Conserjes de San Felipe de una forma justa y sincera? Pues enmarcándola en sus circunstancias que son las siguientes.
Los Conserjes de San Felipe ha sido puesta en escena con ocasión del aniversario de la Constitución de Cádiz que se celebra este año 2012. El texto es del reputado dramaturgo José Luis Alonso de Santos (autor de Bajarse al Moro, entre otras) y la puesta en escena es de Hernán Gené. La propuesta parecía invitar a un guiño histórico en clave de Zarzuela del siglo XXI. Algo simpático y lúdico para festejar la Pepa. Nada de eso.
La obra estaba pensada para el Teatro María Guerrero, pero un fallo técnico de la tramoya la ha reacomodado en la sala grande del Teatro Español. Sea como fuere, estaba programada en un gran teatro de la capital y ha acabado en el que durante estos años ha sido el referente del mejor teatro de este país. Por tanto, no hay excusas que justifiquen el despropósito.
Son muchos los elementos que podrían ser objeto de reproche y puestos a no decir nada bueno sobre escenografía, interpretación, texto, música y montaje, mejor dejarlo en este punto y no sufrir con la remembranza.
Ahora bien, sí es justo decir algo alto y claro. Esta obra es indigna del Teatro Español, como también lo hubiera sido del María Guerrero. El mejor teatro de este país, ese que ha traído a ilustres damas y caballeros de la escena internacional y cuya programación ha regalado al público algunos de los mejores momentos escénicos de las últimas temporadas, no puede permitirse este descenso súbito en su calidad artística. Mario Gas nos dejó tan sólo hace unos meses y ya le echamos en falta. A este paso la peor crisis de la cultura no va a ser la subida del I.V.A. sino el abandono de la grandeur escénica.
Si esta crónica no ha logrado aportar nada bueno sobre una determinada obra, al menos que sirva como reivindicación.
Por tanto, y a quien corresponda: es de suma importancia que la sala grande del Teatro Español continúe siendo un referente seguro para el aficionado teatral.
La clá
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Los Conserjes de San Felipe. Teatro Español.
Cartel de la obra del CDN y del Teatro Español.