Obra Social La Caixa ha montado una exposición de esas que meritan el adjetivo de “imprescindible”. Está dedicada al cineasta francés de principios de siglo, Georges Méliès. Sus películas pueden disfrutarse habitualmente al sonido de una pianola en filmotecas europeas. Gracias a la inmediatez de Internet también es posible explorar ahora sus metrajes a través del ordenador personal o la tableta. Puestos a elegir, nada como acudir a la filmoteca de turno a compartir butaca con aborígenes intelectuales.
La exposición está formada por carteles, películas, cinematógrafos, imágenes o maquetas procedentes de los fondos custodiados por la Cinématèque française. A través de ellos se nos narran los orígenes del cineasta, sus inspiraciones y sus pasiones. También su portentosa habilidad técnica y creativa que se plasmó en las ilusiones fabricadas para sus metrajes.
Méliès es reconocido como uno de los primeros maestros del cine y su película Viaje a la luna (1902) ocupa un lugar de honor en la historia del cine. Sus raíces e imágenes iconográficas tienen su origen en el mundo escénico. El teatro, las variedades y los espectáculos de magia dedicaron gran parte de su vida profesional y de todos ellos extrajo valiosas enseñanzas que luego aplicó al mundo del cine.
Su inmensa admiración por la magia, llevó al hijo de un zapatero a comprar el mítico Théâtre Robert-Houdin a la viuda del famoso mago. Méliès pudo desarrollar plenamente su vocación como escenógrafo e ilusionista en las producciones realizadas para este teatro. Los trucos visuales sobre el escenario se valdrían pronto de las primeras técnicas de inventos como la linterna mágica, que servirían para crear poderosísimas imágenes que Méliès llevaría luego a sus obras filmadas.
Méliès produjo unas 500 películas pero terminó su vida lejos de los focos del cine y arruinado. En una entrevista para The Daily Show, un gran fanático de la historia del cine, Martin Scorsese, cuenta cómo Edison importó Viaje a la Luna de Méliès a Estados Unidos, donde tuvo un gran éxito. Sin embargo, una protección insuficiente de la propiedad intelectual llevó a que Méliès viviera sus últimos años arruinado y lejos de la industria del cine.
A lo largo de la exposición que puede disfrutarse hasta junio en el edificio textil del arquitecto Puig i Cadafalch en Barcelona, puede admirarse la versatilidad de Méliès en la creación de escenarios, decoración de murales, diseño de vestimentas y, por supuesto, en la elaboración de imágenes icónicas del cine.
La muestra viajará después a Madrid. El montaje es riquísimo y son tantas las películas del francés que pueden disfrutarse que sólo cabe realizar una pequeña sugerencia. Sería estupendo que el espacio contase con más asientos para detenerse durante un tiempo a deleitarse con el archivo filmográfico que se muestra en la exposición.
La clá
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Georges Méliès. La magia del cine. Obra Social La Caixa Barcelona.
Archivo digital:
Filmoteca francesa – referencias:
http://www.cinematheque.fr/zooms/melies/index.html#
Entrevista a Martin Scorsese para The Daily Show:
http://www.thedailyshow.com/watch/thu-november-17-2011/martin-scorsese
Imágenes por cortesía de Obra Social La Caixa:
Georges Méliès. «¡¡De lleno en el ojo!! (9º cuadro)», recomposición de una escena de la película Voyage dans la Lune [Viaje a la Luna, 1902] c. 1930. © La Cinémathèque française. Foto: Stéphane Dabrowski.
Georges Méliès pintando un decorado en el suelo de su estudio, con dibujo preparatorio en una de las manos. © La Cinémathèque française. Foto: Stéphane Dabrowski.