La compañía Yllana lleva más de 25 años asentada en la escena madrileña. Empezaron alquilando el Teatro Alfil, luego lo compraron, y desde entonces han desarrollado un humor escénico que no envejece. Su arma de diversión masiva es el humor gestual clásico, a medio camino entre el truco de magia y el mamporrazo del cine clásico en blanco y negro de Charles Chaplin. Se han reído de muchas cosas: del toreo (¡Muu!), de los viajes intergalácticos (Star Trip), del espíritu explorador (Zoo), de los grandes cocineros (Chefs), y de quien se ponga a su paso.
En su casa, que es el Teatro Alfil, siempre tienen algún espectáculo en cartel y, porque ellos pueden, giran además por toda la geografía. En este mes de julio se ha podido ver una condensación de sus mejores sketches en el Teatro La Latina de Madrid.
Fidel Fernández, Juan Ramos, Luis Cao Juanfran y Dorado Jony Elías son los cuatro cómicos que alternan gags en una selección de sketches que no por ser conocidísimos dentro del repertorio Yllana, han perdido su fuerza cómica. El primer gag es un clásico de su humor. Con dos tablones sobre el escenario inventan una coreografía de natación, con tiburón incluido. Luego vendrán las desternillantes escenas de la imagen religiosa, la de la silla eléctrica, la del club de ricos, la de las gafas virtuales, la de los astronautas (usando recursos del teatro negro), y finalizando con la famosísima escena de los pájaros.
El público que acude a verlos es directamente devoto: la mayoría se conoce de sobra muchos de los gags, pero no por ello deja de reírse a mandíbula abierta. En estos días de calor asfáltico, la única manera de sobrevivir a la ciudad es echarse frescor, y no hay mejor truco que disfrutar de Yllana.
La clá
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Imágenes cortesía de la compañía Yllana.
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