Moratín por Goya, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
La Fundación Juan March de Madrid dedica parte de su labor cultural a la divulgación teatral, con montajes de producciones escénicas (la más reciente, una asombrosa ópera de cámara, El pájaro de dos colores), colecciones y materiales divulgativos en web (entre ellos el legado bibliográfico de la familia Fernández Shaw), y conferencias con representantes de la escena actual (como Mario Gas, Alfredo Sanzol o José María Pou).
Esta primera semana de febrero, la Fundación Juan March ha dedicado un ciclo de conferencias a la figura de Leandro Fernández de Moratín (1760-1828), autor de un corpus teatral reducido, pero de enorme éxito, entre el que destaca la obra “El sí de las niñas”.
El ciclo de conferencias estuvo a cargo de Fernando Doménech, filólogo y uno de los grandes investigadores teatrales de nuestro país, y estudioso del propio Moratín. Las conferencias, entretenidísimas, pueden considerarse como un género teatral en sí, pues entre los pasajes eruditos de Doménech, se intercalaron lecturas dramatizadas de El viejo y la niña o La mojigata, piezas escritas por Moratín. La dirección escénica de este ciclo corrió a cargo de Ernesto Caballero, y contó con los actores Chema Adeva, Isabel Dimas, Isabel Madolell y Alejandro Saá. Hubo incluso una lectura dramatizada de un escrito inquisitorial, censurando la obra de El sí de las niñas.
Fernando Doménech hizo un recorrido circular felliniano hacia lo que fue la sociedad en la que vivió Moratín, con el gusto teatral de la época hacia el teatro de magia, la comedia militar o la comedia nueva o de café. Contó cómo los aficionados teatrales del Siglo de las Luces, llegaron a tener bancadas de hooligans. Los mayores adeptos se dividían en dos hinchadas: “los chorizos y los polacos”. Los primeros, defensores del Teatro del Príncipe, y los segundos del Teatro de la Cruz.
La Tirana, actriz conocida en la época y retratada por Goya. También en la RABASF.
Moratín fue un hombre de su tiempo, la Ilustración, testimonio de ello es el retrato que de él realizó Goya y que hoy se encuentra en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Fue, ante todo, un enorme aficionado teatral, y acudió diariamente al teatro durante sus estancias en Inglaterra. La primera traducción del Hamlet de Shakespeare, es precisamente de Moratín, que interpretó el “to be or not to be” como “existir o no existir”. Durante la conferencia, y proyectados sobre el fondo, numeroso cuadros y grabados de Goya sirvieron también para contextualizar la época en la que vivió y creó Leandro Fernández de Moratín.
En la sección multimedia de la Fundación March, se puede disfrutar de la sabiduría de Fernando Doménech.
La clá
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Moratín y su tiempo. Fundación Juan March, Madrid.
https://www.march.es/actos/102957/
Imágenes del retrato de Leandro Fernández de Moratín, por Francisco de Goya (1799) y de la actriz conocida como La Tirana (1792), también por Goya. Cortesía de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
http://www.realacademiabellasartessanfernando.com/es/goya/goya-en-el-museo-de-la-academia
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