El comité organizador de los Premios Max de las Artes Escénicas ha dado a conocer esta semana los finalistas de las 19 categorías a concurso de la XXIII edición de estos galardones organizados por la Fundación SGAE, con el propósito de reconocer el talento de los profesionales del Teatro y la Danza de nuestro país, y la promoción de los espectáculos de la temporada.
Los ganadores de la XXIII edición de los Premios Max de las Artes Escénicas se darán a conocer el próximo 7 de septiembre en la gala que se celebrará en el Teatro Cervantes de Málaga. Además de las 19 candidaturas a concurso se conceden 3 premios especiales: el Premio Max de Honor, que distinguirá la trayectoria de una persona por su aportación, entrega y defensa de las Artes Escénicas, el Premio Max Aficionado o de Carácter Social, que engloba proyectos a favor de la integración y la proyección social y a compañías aficionadas con una sobresaliente contribución a las Artes Escénicas, y el Premio Max del Público, que se concederá al espectáculo que obtenga mayor número de votos del público a través de la aplicación online #VotaMax, abierta hasta el próximo 20 de mayo. Este año, los Premios Max cuentan con la colaboración del Ayuntamiento de Málaga.
El listado de finalistas está disponible en este enlace.
Entre los finalistas hay obras e interpretaciones reseñadas en La clá.
Jauría. Pavón Teatro Kamikaze.
Sin duda, uno de los espectáculos de la temporada por su gran repercusión dentro y fuera de las tablas. No sólo se abrió el montaje a público joven, de institutos, sino que se organizó una serie de debates con miembros de la sociedad civil.
Miguel del Arco charló con La clá a propósito del montaje (entrevista disponible en este enlace), en la que habla del proceso de creación, de la sabiduría de Jordi Casanovas en confeccionar un texto teatral a través de las declaraciones policiales y los documentos de sala.
La producción contó con apoyo externo, destacando el asesoramiento de la abogada Lucía López, que participó en un seminario organizado por la asociación DENAE sobre teatro documento para explicar su experiencia en Jauría (crónica en este enlace).
Jauría recibe nominación finalista como mejor espectáculo teatral y para su autor, Jordi Casanovas, como mejor adaptación teatral.
Acróbata y Arlequín. La Maquiné.
Tres nominaciones recibe este cuento clásico circense a cargo de una de las compañías de teatro infantil más deliciosas. La Maquiné destaca por su delicadeza y por el gusto por los clásicos. En la Feria de Teatro de Ciudad Rodrigo este blog reseñó su plástica producción Acróbata y Arlequín, un homenaje al mundo de Chaplin, Picasso y los Circos (crónica en este enlace). Recibe nominación finalista a mejor espectáculo infantil, mejor diseño de vestuario y mejor diseño de iluminación. Además, La Maquiné será la compañía encargada de dirigir la gala.
Los Mariachis. Pablo Remón.
La obra se vio en los Teatros del Canal, y el elenco de actores invitaba, sin más, a acudir en tropel: Israel Elejalde, Luis Bermejo, Francisco Reyes y Emilio Tomé. De Pablo Remón publiqué en este blog:
A Pablo Remón se le nota el audiovisual por los siete costados. Hace un teatro cinematográfico. Con textos que parecen guiones de Tarantino, y con unos ademanes escénicos (música, escenografía, interpretaciones) que emparientan con la clásica road-movie americana. La pobreza huele, dice uno de los protagonistas. Y ese ambiente de secano, de fiesta patronal con San Pascual Bailongo, de botellines tirados y hasta de una gorra de Pluto, son dardos visuales para recrear una historia de telediario, ambientada en Castilla, con unos tremendos actores, y un texto que culebrea y remata.
Hermanas. Bárbara e Irene.
Irene Escolar sale nominada como mejor actriz protagonista para los Premios Max. Los premios son siempre de imposible satisfacción. Veo casi imposible nominar a Escolar sin nominar a Lennie en este montaje, porque su interpretación es siamesa. Pero las reglas son las reglas. Hablé en su día de Hermanas como un retablo de Nenúfares del impresionista Monet en esta crónica. Pascal Rambert hizo de la relación entre hermanas una continuación de La clausura del amor. Rescato este párrafo de aquella crítica:
Ahora bien, si el recurso dramático es certero, la ejecución roza lo sublime. Veo Hermanas, no ya como una representación, sino casi como una performance en la que Bárbara Lennie e Irene Escolar han acudido a ser exorcizadas. Es casi imposible despegar la mirada de ellas, y en ocasiones parece que la bronca se está generando en ese momento, sin diálogos previamente aprendidos, sin movimientos coreografiados. Esta altitud interpretativa de estas jóvenes e inmensas actrices es apabullante. Hay que quitarse el sombrero ante cualquier intérprete que es capaz de gritar sin desentonar, de llegar al límite sin notarse sobreactuado, que tiene el talento de tirarse por el precipicio sin perder la verdad. Irene y Bárbara están ahí, en ese olimpo. Y como seres supra-terrenales que son, consiguen, a mitad de función, crear una escena grandiosa y arriesgadísima, marca también de Pascal Rambert, fijando la mitad del primer acto pero sin pausa. En el ecuador de la representación, abandonan (momentáneamente) el ataque cuerpo a cuerpo, y pasan a compartir un baile frenético, al son de un cover discotequero de Wonderful Life de Black.
Premio Max del Público.
Hasta el 20 de mayo es posible votar por el Premio Max del Público.
La clá
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Premios Max